manecía madrugadora la mañana. Un pequeño grupo nos preparábamos desde Salamanca para competir en Valladolid en el VI Torneo de Ajedrez en memoria de Sergio Sanz, un evento benéfico, bonito y lleno de buenas intenciones. Hacia allí nos dirigíamos varios amigos del Club de Ajedrez Salamanca: Adrián Garcia del Castillo, Miguel Ángel Limón Franco, Lucía Sánchez Elena, joven promesa del ajedrez salmantino; Daniel Castillo Sanjuan y un servidor.
La sala de juego se correspondía con el elegante Teatro Zorrilla pucelano, donde asistieron alrededor de un centenar de jugadores. Entre ellos se encontraban por ejemplo 6 titulados: (GM) Del Rio De Angelis Salvador G, (GM) Strikovic Aleksa, (GM) Larino Nieto David, (GM) Campora Daniel H., (IM) Zlotnik Boris A,
(FM) Martinez Reyes Pedro Ramon, y (FM) Andres Gonzalez Ivan, entre otros muchos buenos jugadores.
La mañana fue intensa, en la cual tuvieron lugar 5 rondas donde ya se pudo comprobar que no iba a ser fácil llegar y mantenerse arriba, en el escenario.
“Entre los nuestros” se colocaban muy bien tanto Adrián (con 3,5pts) como Daniel (con 4pts) de cara a la tarde.
Aprovechamos la comida para reponer fuerzas y compartir diálogos con otros otros compañeros salmantinos.
Luego llegaron las dos últimas rondas, donde se decidía el torneo. Interesantes batallas y sorprendentes resultados tuvieron lugar durante las mismas.
Pero finalmente, a pesar del gran nivel que había, nuestro equipo acabó victorioso y contento por haber realizado una gran actuación:
Adrián se posicionó con 5,5 puntos de siete posibles en un espectacular octavo puesto en la clasificación general, Daniel obtuvo el premio al segundo mejor jugador con ELO<2000 y yo alcancé el premio al segundo Sub1900, Lucía hizo la gran marca de 3,5 puntos en este duro torneo, y Miguel Limón remontó en la recta final para quedarse con 3 puntos.
Aunque realmente la parte más importante fue que este acontecimiento pudo servir para ayudar económicamente, a través del dinero recaudado y donaciones realizadas, a continuar con la lucha contra el cáncer.
Crónica de Carlos Guerrero Ciudad